¿Tiene un ordenador en su empresa? Lógicamente, porque es una herramienta que le ayuda a hacer tareas que de otra forma llevaría mucho más tiempo y supondría un mayor coste.
¿Recuerda cuando no era así? Aunque ahora nos parezca difícil recordar incluso hubo una época en la que ninguna empresa tenía equipos informáticos, no hace falta ir muy lejos. De hecho la mayor parte de la historia empresarial se ha desarrollado sin ordenadores. Esto ha ocurrido durante cientos de años y empresas conseguían dar beneficios a pesar de realizar las tareas de gestión, contabilidad, comunicaciones, etc. manualmente.
Y no les quedaba otra opción ya que no existía la tecnología para ser más eficientes y tenían que conformarse con perder mucho tiempo y dinero en hacer las cosas de forma a mano.
Si hubiera existido la tecnología, ¿hubiera tenido sentido contar con un ordenador y así ahorrar miles de euros? Sin duda, porque muy lejos de ser un gasto es una inversión excepcionalmente rentable.
Lo mismo ocurre en las empresas de transporte y el equipamiento de limpieza de última tecnología.
¿Por qué tirar el dinero cuando sí existe la tecnología que permite ahorrar miles de euros en gastos de limpieza? ¿Se imagina a una empresa que hoy no cuente con al menos un ordenador? Sería absurdo, ¿verdad? Aunque parezca imposible a día de hoy hay empresas que siguen tirando a la basura miles y miles de euros, tienen que despedir empleados, bajar la calidad del servicio, e incluso cerrar y arruinarse porque no aprovecharon las ventajas de ahorro que proporciona la última tecnología en limpieza.
A nosotros en el grupo JMB nos motiva mucho poder ayudar a que empresas como la suya a evitar esos problemas y a ser más rentable, a multiplicar su productividad, y a dar más beneficios.
Sin duda los equipos y máquinas de limpieza son una inversión altamente rentable y eficaz que le ayudarán a su empresa.
Las empresas de transporte de viajeros no solo llevan personas de un lugar a otro, sino que deben buscar diferenciarse aportando un valor añadido a sus servicios, para que, por ejemplo, el usuario elija un autobús frente a un avión.
Vamos a dar aquí tres elementos clave y diferenciadores que una empresa de transportes debe cumplir, y que venimos observando que no todas cumplen.
1. Acceso a Internet WIFI. Cada vez más las personas están en constante comunicación a través de dispositivos móviles, y más si esas personas están relacionadas con el ámbito digital, las redes sociales e Internet. Muchos usuarios quieren que, el tiempo que les dure el viaje, no estén incomunicados con sus empleados, colaboradores, en fin, con su trabajo, y necesitan estar con constante acceso a Internet. Si bien es cierto que la instalación de redes WIFI tiene un coste elevado, es un coste que se verá recompensado con la satisfacción del usuario y que puede ser el factor decisivo en la elección del modo de transporte.
2. Trato al cliente. Parece obvio, pero muchas veces se olvida este aspecto tan básico, como es una palabra amable, el respeto al viajero, la paciencia. Los empleados reflejan la filosofía y el espíritu de la empresa. En esta apartado podríamos incluir la forma de conducción; a veces (unas justificadas y otras no), el conductor del autobús da volantazos, frenazos o conduce de forma brusca, y el viajero puede sentirse incómodo, hacerse daño o sentir que le tratan como si de una carga se tratase. Hay que evitar estos comportamientos en la medida de lo posible, dando, si es necesario, unas clases de conducción correcta a los empleados.
3. La higiene interior del vehículo y el estado de la instalación. Es muy importante, no sólo que no haya papeles o basura en el suelo o asientos del vehículo, sino que no haya olores desagradables, o fuertes (como sucede en muchos autobuses), el estado de conservación del autobús; que los asientos estén perfectos, no haya pintadas en los respaldos, no falten elementos; todo debe funcionar perfectamente, desde el reposabrazos hasta el reproductor de audio de los asientos.